Una de las estrellas del último salón de Ginebra resultó ser el nuevo Volkswagen Polo. La buena noticia se torna doble al tratarse de un vehículo no precisamente destinado a un segmento premium, como suele ocurrir en estos casos. Pero averiguando sobre el nuevo auto, nos enteramos que sus dimensiones son muy parecidas a las del nuevo Volkswagen Gol brasilero que se vende en nuestro país, y por su distancia entre ejes, sospechamos que lleva la misma plataforma, pero a diferencia de éste, todo en él parece bien hecho. Por empezar, sigue los criterios de diseño introducidos por la marca alemana en el Golf VI. El auto es verdaderamente bello. Luce en general más "musculoso" que el modelo de Brasil y da la idea de ser más voluminoso. La trompa, mucho mas lanzada que en el que nos tocó por estos lares, es de típico diseño Volkswagen. En realidad, todo el auto parece gritar: "¡Soy un Volkswagen!". Los paragolpes son más voluminosos. El delantero está separado de la parrilla, que es mucho más escueta y distintiva de la marca. Esta separación evita que, en caso de que el paragolpe resultara dañado o se caiga, no involucre también a la parrilla. Las ventanillas llegan en su extremo superior hasta el borde de la puerta, evitando esos marcos enormes del producto Mercosur. El parante A tiene un grosor lógico, mientras que el parante B, es notablemente más angosto y no se percibe esa especie de divorcio entre las dos mitades del auto que ostenta el auto de esta zona. Las llantas tienen cinco rayos, una cantidad lógica frente a los ¡doce! del Gol. El sector trasero tiene algunas líneas en común entre los dos modelos y aunque es más armonioso en el alemán, pareciera que también los diseñadores europeos han decidido homenajear con este modelo al Gol de primera generación. En fin...¿tenemos que decir que toda esta cosa del Gol Trend podría haberse evitado si Volkswagen fabricara en el Mercosur el nuevo Polo (y que lo llamen como quieran, incluso Gol) que es un auto netamente Volkswagen, diseñado en el país de donde proviene Volkswagen y que esa cosa hecha en Brasil no se justifica cuando en origen tienen un auto de dimensiones similares, perfectamente adaptable al "desafío que representa el Mercosur"? Y todo por sostener una especie de chauvinismo, muy loable dentro de Brasil, pero que no tenemos porqué soportar en el resto de Sudamérica. Eso sí, muchachos, el día que Volkswagen se instale en la Argentina, todo puede cambiar...
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